Mi Pepito Grillo particular me decía el otro día que el anterior artículo requería un contenido más serio. No limitarnos a la crítica del descabalgamiento de las SICAV, sino realizar una propuesta más constructiva, y realmente Pepito Grillo, como casi siempre, tenía razón. Por eso me pongo a ello.
Debo partir de las propuestas que hacen los partidos políticos más significativos para poder explicar mejor lo que pienso:
Propuesta 1.- los accionistas de las SICAV deberán tener un mínimo del 0,55% a efectos del cómputo de los 100 partícipes (PP)
Propuesta 2 .- Dotar a la AEAT de competencias para que supervisen e investiguen a las SICAV. (C,s y PSOE)
Propuesta 3.- Transformar la SICAV en IIC abiertas para que cualquier persona pueda participar en ellas (C,s)
Propuesta 4.- Establecimiento de un porcentaje máximo de participación. (PSOE y Podemos)
Propuesta 5.- Periodo máximo de permanencia para las plusvalías acumuladas sin tributación (PSOE y Podemos)
Propuesta 6.- Supresión de la tributación al 1% (Podemos)
Propuesta 7.- Control del número real de socios (Podemos)
Propuesta 1.- El tema del mínimo de participación en la SICAV (como modo de ponerles pegas a los famosos “mariachis”) es sólo curioso, Está claro que fuerza a los mariachis a hacer una inversión superior, por lo que será más complicado reunirlos, y fuerza al socio dominante a tener sus mariachis de estricta confianza que le garanticen al menos mantener en cualquier momento su posición de dominio. Pero si eso lo que pretende es que realmente así sea una “Institución de Inversión Colectiva” y no una ficción de tal, puede que haya que preguntarse qué habría de malo en quitar lo de los 100, para cargarnos la ficción, y así que sea el socio mayoritario el que decida a cuántos está dispuesto a invitar a participar en sus negocios de inversión. Esto es, habría que preguntarse si realmente es interesante disponer de un vehículo de inversión que permita a las grandes fortunas aportar capital a otros negocios, haciendo que, en consecuencia, los recursos sean siempre productivos.
Propuesta 2.- La AEAT debe tener sus competencias en lo que le es propio, la supervisión fiscal, y la CNMV en lo suyo, la supervisión del cumplimiento de la normativa del mercado de valores. El cruce de competencias lo único que ha generado siempre es ineficiencia.
Propuesta 3.- La transformación de la SICAV en una IIC abierta significa la desaparición de las SICAV, puesto que una IIC abierta es aquella en la que la aportación es reembolsable. No parece que se refiera a eso la propuesta de Ciudadanos. Y si lo es, ¿para qué? ya hay otras IIC abiertas y no veo por qué motivo ni por qué circunstancia en España se haya de invertir sólo en IIC abiertas, mientras que en el resto de Europa se pueda invertir en IIC abiertas y cerradas. Es una cuestión técnica que deja mucho que desear como propuesta pues no se sabe qué pretende solucionar, y lo único que va a generar es que en un mercado de libre circulación de capitales como el europeo, el capital que quiera una IIC cerrada se tenga que ir a otros países, para perjuicio de nuestra economía.
Propuesta 4.- A lo del porcentaje máximo de participación se le responde igual que a la propuesta 1. Dejémonos de mariachis y creemos instrumentos para que las grandes fortunas puedan invertir en España a su juicio.
Propuesta 5.- Si ese periodo máximo de permanencia es distinto en los distintos países europeos, o no existe, nos vamos a encontrar con diferencias de trato que van a restar competitividad a la economía española en la captación de capitales de inversión. No nos olvidemos que los bancos no pueden ser el único sistema de financiación de las empresas, que el capital social, mediante su colocación a través de Instituciones de Inversión Colectiva, es una de las mejores formas de financiación por su carácter estable. Cuando se quiere adoptar una medida así, se debe revisar antes donde está invertido el capital de las SICAVs, y luego ya se puede empezar a pensar en las consecuencias.
Propuesta 6.- Supresión de la tributación al 1%. ¿Han pensado bien en lo que dicen? Una SICAV es una sociedad que invierte capital en empresas. Y gracias a ese capital las empresas tienen vida y tributan en sus respectivos tipos impositivos. Si al vehículo de aportación de capital le ponemos una tributación añadida, estamos haciendo que las distintas actividades materiales (telefonía, electricidad, transporte, etc…) generen unos rendimientos que tributa 1º en sede de las empresas respectivas (por su Impuesto sobre sociedades), luego en el vehículo (el 1% simbólico era lo lógico), y luego en destino cuando se reembolsa (que según sea persona física o sociedad será lo que tenga que ser). Los vehículos de inversión tienen tributación reducida, casi simbólica, porque su actividad no es más que servir de instrumentos de canalización de recursos de capital. Y eso se debería entender, al menos.
Propuesta 7 .- Eso del control del número real de socios ya suena raro. El número de socios es el que es. Si lo que se refiere es para saber cuantos son “mariachis” y cuantos juegan en primera persona, pues mas valdría hacer que las cosas sean naturales y no forzar ese número tan elevado de partícipes. Las SICAV son un vehículo de inversión imprescindible que inyecta miles de millones en el tejido empresarial español. Si no existiesen, habría que inventarlas.